miércoles, 16 de octubre de 2013

El paseo y la tumba del poeta (Robert Walser)



"En un bello y dilatado paseo se me ocurren mil ideas aprovechables y útiles. Encerrado en casa, me arruinaría y secaría miserablemente. Para mí pasear no sólo es sano y bello, sino también conveniente y útil. Un paseo me estimula profesionalmente y a la vez me da gusto y alegría en el terreno personal; me recrea y consuela y alegra, es para mí un placer y al mismo tiempo tiene la cualidad de que me excita y acicatea a seguir creando, en tanto que me ofrece como material numerosos objetos pequeños y grandes que después, en casa, elaboro con celo y diligencia."

El paseo, 1917


"Zsolnay precisamente no es más que un infame editor de novelas que huye como un conejo de la eventualidad de tener que publicar, es decir editar, poesía. De todos modos estoy muy emocionado, o lo que es lo mismo de acuerdo, si usted quiere ocasionalmente recomendarme a ese pilluelo que, como cualquier otro mocoso aprendiz de editor, tiembla ante la poesía, hecho comprensible. Si escribe al inútil ese, por favor que sea una misiva muy breve, seria, magnánima, arrogante antes que suplicante. Los escritores que a los ojos de los editores son una banda de desharrapados, deberían tratar a éstos como a cerdos roñosos. En lo que a mí respecta muéstrese orgulloso, delicado, grandilocuente con ese agente cultural vienés. Por de pronto yo no le presentaría ningún material a esa garrapata, pues se hundiría en una vanidad apestosa. En mi opinión la forma de tratarlos es muy importante. Además la edición de un libro me parece buena e interesante cuando todavía no ha tenido lugar, pues todo libro impreso es una tumba para el poeta, ¿o no?"

Carta a Max Brod, 1927